En una época moderna como la nuestra, donde la tecnología y las computadoras son los maestros también en el campo de la odontología, en un periodo en el que los artículos y redes sociales se utilizan para mostrar asombrosas actuaciones estéticas de los técnicos dentales, luchando con sofisticados materiales cerámicos, un artículo como éste, centrado en unas pocas operaciones diarias simples, sin duda se ve fuera de la realidad mediática.
Pero de hecho, es la realidad verdadera la que no tiene en cuenta la mayoría de las revistas y redes sociales. Seamos serios y sinceros! Los problemas cotidianos son, quizás, los de hacer siempre carillas en disilicato, maquetas (mock up), etc.
No es tal vez cierto que casi todos los días nos encontramos frente a las reparaciones que es necesario hacer en una hora, pegar dientes perdidos, construir pequeñas prótesis parciales para «tapar agujeros» después de que el odontólogo ha extraído los dientes y sin previo aviso, envía al laboratorio impresiones con la orden imperativa de construir una prótesis con dos ganchos, ya que el paciente no puede soportar ni una hora sin dientes?
O se debe terminar una estructura metálica para una prótesis parcial removible aún sin probarlo, porque tiene la primera comunión del sobrino o el matrimonio de la hija que siempre parecen llegar cuando nadie lo sabía antes?
Esta es la realidad! ¿Cuántas veces hemos maldecido, en total frenesí, la resina que se sigue rodando, no se estabiliza y cuando lo hace ya está porosa? ¿Cuántas veces hemos querido hacer todo a la vez y en su lugar tenemos que polimerizar primero un lado de la estructura metálica y luego el otro, de lo contrario no podemos manejar la resina que desafortunadamente sigue filtrándose y deslizándose hacia abajo?
A veces, para la fabricación de una prótesis parcial, la llamada «mariposa» con dos ganchos y uno o dos dientes, primero tenemos que encerar el conjunto, hacer matrices de silicona y eliminar cera con procesos similares a una prótesis total, pero tenemos poco tiempo.
Así, mientras estás luchando con los trabajos de todos los días que no terminan en los escenarios de nuestras conferencias o en las páginas de las revistas, sueñas un nuevo material, una «bendita» resina que se quede firme, que te permita hacer el modelado adecuado sobre la estructura metálica en ambos lados en un solo momento, o que te permita hacer un pequeño parcial sin hacer matrices de silicona, etc, etc.
Pues bien, esto es posible con la resina acrílica Veracril! Una resina aparentemente normal, pero que resuelve con la máxima sencillez un gran problema diario: la de la resina que gotea y no se queda firme!
La resina acrílica Veracril Autopolimerizable es una resina con la misma apariencia de todas las demás, pero si se mezcla en las proporciones adecuadas según las instrucciones y se espera el tiempo correcto, (teniendo en cuenta la temperatura ambiente), en un punto determinado de la fase de polimerización llega a una consistencia plástica maleable que nos permite hacer todo con más rapidez y menos ansiedad.
Ahora, en este período que hemos definido plástico-moldeable de la resina, ciertos trabajos diarios que se clasifican como urgentes porque requieren de una entrega rápida, pueden ser modificados en comparación con los pasos clásicos, omitiendo completamente algunas etapas, los ejemplos de este sencillo artículo sólo son algunas de las posibilidades que puede ser enumeradas en las que se puede explotar esta fase de especial maleabilidad de la resina acrílica Veracril Autopolimerizable.
Manipular la resina acrílica Veracril para prótesis simultáneamente en los dos lados de la estructura metálica en la prótesis parcial removible sin verla rodar continuamente o posicionar y volver a colocar los dientes en prótesis pequeñas sin ni siquiera hacer el montaje de la cera son posibilidades que no existen con las resinas acrílicas clásicas; pero que, aún sin ser realizadas de acuerdo con las reglas canónicas, puede ser la panacea para esos momentos en los que el tiempo se acaba, el paciente no puede soportar estar desdentado ni siquiera una hora y tenemos un tiempo tan apretado que cada minuto ganado es precioso.
No hace falta decir que si esto tiene valor en el laboratorio, tiene aún más valor en las denominadas «zonas de retoque» de los consultorios odontológicos. Ese tipo de «trastienda», donde los odontólogos llaman a los técnicos para resolver las disputas diarias con los pacientes que ni siquiera se levantan de la silla si no tienen su prótesis en la boca. El mismo odontólogo, si quiere hacer personalmente algunas reparaciones, con este material tiene una tarea mucho más fácil porque las resinas tradicionales no son fáciles de manejar en situaciones de agitación.
Volviendo al técnico, es en estas situaciones que él da el máximo de sí mismo y no sólo cuando tiene que resolver los bellos casos estéticos! Cuando tiene que resolver de forma rápida: pegando, ajustando, reparando, reforzando; es allí que una resina plástico-moldeable como Veracril puede hacer la diferencia, haciendo ahorrar hasta el 50% del tiempo.
Calidad no sólo significa la excelencia absoluta en el resultado final, sino que es igualmente importante responder a las necesidades inmediatas de un paciente que necesita salir del estudio con algo en la boca que preserve su dignidad.
Gracias a mi colega Alberto Battistelli.
Autor: SDT. Alberto Cecere
Tomado y traducido de:
http://infodent.it/news/resina-veracril-plasticita-velocizzare-la-quotidianita#.WV_DF1GQy71