Con Lidocaína dile adiós al dolor

Alguna vez un paciente te preguntó antes de iniciar un procedimiento: “doctor, ¿esto va a doler?” Sin duda, aliviar la aflicción de los pacientes es un motor que mueve día a día a los odontólogos y, lograrlo, un privilegio. Sentir dolor ha sido a través de la historia tan atemorizante como la idea de morir y no es de extrañarnos que desde las civilizaciones antiguas ya se emplearan plantas para anestesiar el malestar bucal como la  mandrágora, la adormidera o el cáñamo, sucedidas por el opio, la cocaína en 1884 y la procaína sintetizada en 1905. Actualmente, gracias al avance de la tecnología contamos con un amplio espectro de técnicas para controlar el dolor entre las cuales resalta la Lidocaína, un anestésico de tipo local con un efecto rápido, intenso y duradero que lo catalogan como el más empleado a nivel mundial, y en cuya fabricación y distribución somos expertos en New Stetic.

¿Cómo actúa?

Existen dos formas de controlar el dolor: eliminando su causa o bloqueando la transmisión de estímulos dolorosos. La clave de la Lidocaína radica en la segunda, pues tiene la capacidad de inhibir la iniciación y conducción de impulsos neuronales evitando que las señales de dolor lleguen al cerebro de la persona, al bloquear los canales de sodio del axón. La absorción de la Xilocaína se da a través de
la membrana mucosa que recubre las paredes internas de algunos órganos como la boca y, su efecto, depende de la vascularización del lugar de aplicación, la dosis y la
 presencia o
no
de
un vasoconstrictor. Si bien este anestésico se metaboliza primero en el hígado, su excreción ocurre por vía renal a través de la orina: 90% en forma de metabolitos y un 10% como droga intacta. Por ello, cualquier
afección de la
 función
 hepática
en el paciente puede
 alterar el curso de la Lidocaína al punto de doblegar la duración de sus efectos.

La Lidocaína: clásico de clásicos

El campo de la cirugía bucal requiere suprimir la sensibilidad de una zona determinada de la cavidad oral del paciente pero manteniendo intacta su consciencia, por lo cual la Lidocaína, sintetizada, que se introdujo al mercado en 1948, resulta ser el anestésico ideal y clásico por excelencia. También conocida como Xilocaína, este medicamento de la familia amida consta de un polvo disuelto en ácido clorhídrico que puede inyectarse o usarse de forma tópica en crema, ungüento y hasta aerosol, tradicionalmente empleada en odontología para entumecer la piel y los tejidos debajo de ella previo a realizar intervenciones simples, como en operaciones menores de la encía, manejo de caries, etc. o antes a inyectar otro medicamento.

¿Cuánto dura?

Ya en la Babilonia del 2250 a.C. se escribió en tabillas de arcilla el remedio contra la carie dental que constaba de una combinación entre semillas de beleño y almaciga, aplicado en la cavidad del diente. Hoy en día, la infiltración de la Lidocaína, ya sea en la vecindad del nervio o cerca del él, tiene una constante de disociación baja de 7.9  que posibilita una inducción casi inmediata de la solución anestésica entre los 2 y los 4 minutos, un tiempo corto en relación con otros anestésicos como la bupivacaína. El efecto de la Lidocaína puede durar entre 90 y 120 minutos según si la técnica empleada para la inyección fue infiltrativa o troncular, ubicándola en la categoría de anestésicos con mediana duración.

Precauciones

Si bien la morbilidad por Lidocaína y otros anestésicos locales es muy baja en general, resulta vital seguir precauciones para evitar sobredosis y efectos secundarios como intoxicación o depresión del sistema nervioso central. En principio, debes explicar a cada paciente que va a estar expuesto a Xilocaína al tiempo que investigas si sufrió alguna reacción inusual a anestésicos locales o la los vasoconstrictores. Es común que tras el uso de Lidocaína se presenten reacciones como vértigo, temblor, náuseas, taquicardia, hipotensión, excitación del nervio traducida en ansiedad o nerviosismo y depresión respiratoria, entre otras, por ello, recuerda que la anestesia local por infiltración no deben realizarse en zonas infectadas o inflamadas, y que antes, durante y después de aplicada debe haber un monitoreo cardiaco y respiratorio pues al menor cambio de estos parámetros debe proveerse oxígeno inmediato al paciente.

Es de especial importancia advertir a deportistas que la Lidocaína puede marcar positivo en las pruebas antidoping, al igual que preguntar a los pacientes si usan fármacos como los Inhibidores de proteasa del VIH, los beta bloqueantes, la amiodarona o los derivados ergóticos, que pueden presentar reacciones adversas con la Xilocaína.

Presentaciones

También llamada comercialmente Newcaína, la Lidocaína viene normalmente en dos presentaciones, ambas elaboradas por New Stetic con calidad certificada: una simple, con una concentración del 2% y otra, compuesta, con igual concentración pero combinada con el vasoconstrictor Epinefrina, las dos con una base de 36 miligramos de anestésico por cada cartucho de 1.8ml. En vista de que la mayoría de anestésicos locales son vasodilatadores, con excepción de la cocaína,  se recomienda adicionar a la Lidocaína un vasoconstrictor que disminuya la velocidad de absorción vascular del anestésico logrando un efecto más duradero, disminución del riesgo de toxicidad y el sangramiento en la zona de infiltración.

Utilizada también en forma endovenosa como antiarrítmico o bactericida, la Lidocaína derivada del ácido acético, puede aplicarse en una dosis máxima de 3mg/kg que equivale a 8.3 cárpules o cartuchos dosificadores o de 7mg/kg cuando está combinada con un vasoconstrictor de 1:50:000,  1:80:000 u  otras porciones, equivalentes a 13.8 cartuchos. Para evitar dolor al aplicar la Lidocaína se recomienda sostenerla en la palma de la mano por rato para calentarla, mantenerla al baño maría a 36°C y aplicarla lentamente.

En definitiva, lograr que el paciente permanezca consciente y sea capaz de colaborar, una distorsión mínima de su fisiología, ser fácil de aprender y ejecutar, al igual que un porcentaje de fracasos muy bajo y ningún gasto adicional para el paciente, sin duda hacen de la Lidocaína 2% y Lidocaína 2% con Epinefrina, un anestésico local excepcional para múltiples procedimientos de salud oral que puedes adquirir en sus distintas presentaciones a través de nuestra página web New Stetic, al alcance de un clic.